30 agosto 2007

Los Diferentes Estilos del Inversionista

Hemos analizado por separado en anteriores ensayos, varios de los diferentes estilos ó aproximaciones de un inversionista al mercado. Por ejemplo, hemos discutido Inversiones por Valor(1), Inversiones por Opinión Contraria(2), Especulación(3), Reversión a Media(4), etc.

Podemos tener éxito como inversionistas en los mercados de valores, sólo si las condiciones del mercado son compatibles con el estilo de inversión empleado. Puede ocurrir que saltemos de un estilo de inversión despreocupadamente, lo cual puede ser contra-producente a nuestros objetivos si no somos conscientes de la razón de nuestro cambio ó, simplemente, estar empleando la aproximación de inversión equivocada. Se requiere reconocer entonces con toda claridad (es imperativo hacerlo), con cual de éstos estilos nos identificamos y si efectivamente tenemos un patrón de conducta fuertemente anclado a alguno de ellos.

Por ello pienso resultará muy útil repasar sobre estos temas.

Un inversionista basado en valor es aquel que efectúa cálculos de valoración sobre un activo financiero con el objeto de determinar posibles desviaciones con respecto a un valor justo ó intrínseco. De encontrar un activo sub-valorado, la práctica indica que se debe emplear la estrategia de “comprar y mantener” hasta tanto alcance su valor intrínseco. Este tipo de inversionista es una persona conocedora de las técnicas de valoración y ha alcanzado un alto grado de sofisticación en su arte. Un inversionista por valor, típicamente mantiene su posición contra viento y marea hasta lograr su objetivo a menos que su modelo financiero le indique que ha ocurrido un cambio en sus proyecciones. Son capaces de producir cualquier cantidad de dinero pero para ello se necesita tiempo y paciencia. Por lo tanto, este tipo de inversionista está caracterizado por la perseverancia, disciplina y por supuesto, muchos conocimientos técnicos.

A mi manera de ver, son relativamente pocos los dedicados a esta ciencia. Aunque muchos creen pertenecer a esta clase, jamás abren una hoja electrónica para modelar al activo. Lo más probables es que se encuentren en la categoría de tomadores de consejos (tips), de otros que sí son conocedores de la materia. Por cierto que el problema con los tomadores de consejos, es que no son capaces de reconocer por sí mismos cuando los fundamentales han cambiado y generalmente son tomados por sorpresa por el mercado y terminan tomando cuantiosas pérdidas.

Ahora encontramos los que se llaman y se sienten contrarios. Este tipo de inversionista, por algún interesante mecanismo psicológico, siempre anda batallando en contra de la tendencia principal (Momentum) del mercado. Parecen haber sido programados para pensar que la actual trayectoria se encuentra sobre-extendida (en cualquier dirección). En cierto sentido, esta clase de participante es practicante (a veces sin saberlo) de la estrategia de “reversión a la media”. En mi opinión, los contrarios son tales, entre otras razones, por un mecanismo de compensación psicológica la cual dice, “ya que me dejó el tren, pues esperaré a que regrese”.

Ejemplo de este estilo es Víctor Niederhoffer, autor del best seller “La Educación de un Especulador(5),” y para quien escribí, por unos años, en su sección “Daily Speculations”. Víctor hizo colapsar sus tres fondos en 1997 aplicando esta aproximación: apostó en contra de un mercado claramente a la baja, subscribiendo contratos “Puts”. La tendencia duró más de lo esperado (no linealidad ó caos) y sus fondos se evaporaron. De él escribió su mentor el multimillonario George Soros lo siguiente:

“He is an inveterate contrarian… and he regularly made small amounts of money trading on that theory. There was a flaw in his approach, however. If there is a tide, he can be seriously hurt because he doesn’t have a proper fail-safe mechanism”. (6)

Este es uno de los párrafos más valiosos que he encontrado en la literatura financiera y tuvo que ser Soros quien nos abriera los ojos: los contrarios puede ganar claro que sí, pero sus ganancias son limitadas y son muy propensos a volarse la cabeza en los mercados. La razón no puede ser más sencilla: siempre, siempre requerimos de una tendencia para hacer dinero. Si nos la pasamos contradiciendo la tendencia, pues ganaremos solamente cuando la tendencia cambie abruptamente, lo cual sólo sucede muy de tanto en tanto. Luego al tener la tendencia a nuestro favor, pronto la abandonaremos pues estamos neurológicamente programados (PNL) como contrarios. En otra ocasión, y por nuestra naturaleza contraria, nos enfrentaremos a la tendencia en forma obcecada y allí será nuestro final como inversionistas.

Otro grupo de inversionista son los adivinadores y apostadores (no confundir con los contrarios, aunque Soros también caracterizó a Niederhoffer como apostador empedernido). No deseo prestar mucha atención a estos grupos. Los englobo simplemente como participantes ego-céntricos en el sentido que para ellos es más importante tener la razón (alimento para su ego), basados en sus elucubraciones de alguna sabiduría convencional, que en hacer dinero. Son los típicos expertos (pundits), comentaristas (TV-Radio-anchors) y dadores de tips, que luego nos dicen: ¿te fijas? YO tenía la razón! Si, ¿pero tomaste ventaja? Respuesta: bueno, no… es que… sabéis que YO… ¿Cómo considerar a alguien como un gran conocedor si jamás en su vida a accionado al menos un OEX, ni hablar de un SPX? No olvidemos dentro de los vaticinadores a los profetas del desastre: los hay desde moderados hasta extremistas, aquellos que presagian al Dow en 5.000 ó menos, basados en algún ingenioso oráculo. No escuchemos a ninguno de estos especimenes. Crucemos la calle al verlos de lejos.

Aparecen ahora los especuladores, una raza muy particular. Esta clase de participante opera siguiendo alguna concepción de su propia cosecha. Su mayor virtud: son capaces de pensar por si mismos! Son generalmente muy conocedores de temas económicos y manejan con soltura las técnicas financieras. Se diferencian de los apostadores en que no son seguidores de creencias populares. A su vez, se diferencian de los valoradores, en que no creen demasiado en el concepto de valor intrínseco. La especulación es una actividad riesgosa, no hay duda. La actividad tiene una curva de aprendizaje muy larga, de 10 ó más años. Durante ese período de aprendizaje se cumple bastante bien aquello que descubrió Louis Bachelier: su esperanza matemática es cero, esto es, lo que ganan por un lado, lo pierde por el otro.

La especulación es posible sólo si los mercados no son eficientes, es decir, la valoración que le da el mercado a los activos está equivocada. Los seguidores de valor, en el fondo creen en esto mismo (muchas veces sin saberlo) pues sino, ¿cómo puede existir un título sub-valorado? El punto clave es que los especuladores transan siguiendo información privada, es decir, información útil que aún no ha sido divulgada. En mi libro “Theory and Practice of Speculation” (por publicar) lo explico de la siguiente manera:

“By definition private information is not publicly available information, a very simple concept indeed. Now I am going to say something not so evident: private information has two components: 1) Insight Information which is against the law to use, because it is privilege-obtained due to the strategic position of an executive and 2) Private Knowledge which is perfectly legal to use because it was obtained by the extremely high skilled and expert individual, and he is clever enough not to make public that knowledge”(7).

Ustedes se preguntarán: ¿y cómo hago yo para obtener ese conocimiento privado? Sólo por medio de una inteligencia superior! Por ejemplo: ¿Cómo hizo Soros para conocer que la Libra esterlina estaba fuera de toda sensatez? Soros montó un ataque especulativo en 1992 a la Libra y le torció el brazo al poderoso banco central del Reino Unido. Se dice que ganó unos 10.000 millones de Dólares en la operación(8).

El tema de la especulación es demasiado amplio como para describirlo en este breve ensayo de lo contrario, yo no hubiese escrito un manuscrito de 400 páginas sobre el tema(7). Lo importante es conocer que la especulación no está basada en una predicción, sino en un conocimiento. Quien intenta adivinar la dirección de un mercado, no es un especulador, es un adivinador. ¡Mucho cuidado con esto! No se vayan a confundir.

Nos queda por comentar un último (por ahora) y valiosísimo estilo de inversión del cual no he expuesto nada ó casi nada hasta ahora. Son los seguidores de tendencia. Ellos no creen en valor, no apuestan, no especulan ni forjan concepciones, no creen en reversión a la media, no intentan adivinar, no hacen cálculos, casi les digo que no piensan…, solo les digo que… ellos siguen la tendencia. Genial! Es que para ganar dinero, queramos ó no, debemos montarnos en algún momento en una tendencia; en verdad, no hay otra manera! Este estilo de inversión requiere de todo un re-entrenamiento mental para ser capaz de ejecutarlo. Brevemente les digo en que consiste la técnica con la siguiente ilustración: un seguidor de valor, intenta comprar barato para vender caro; todos estamos muy familiarizados con esta idea. Por su parte, un seguidor de tendencia compra caro para luego vender aun más caro ó vende barato para luego comprar aún más barato (posición corta).

Seguir tendencias no es tan natural como pareciese en una primera instancia, pues resulta atrevido y de hecho anti-natural, tomar la misma dirección de lo costoso cuando vamos largo, ó de lo regalado cuando vamos corto. Les dejo con unas citas muy a tono con esta última aproximación:

“The trend is your friend except at the end when it bends.” Ed Seykota. Traducción libre: debemos seguir la tendencia excepto cuando la tendencia dobla, allí y sólo allí somos contrarios!

“It is not the bull side or the bear side, but the right side.” / “I think it was a long step forward in my trading education when I realize… that the big money was not in the individual fluctuation but in the main movement.” Jesse Livermore.
Traducción libre: lo único importante en los mercados es hacer lo correcto. / Todo cambió para mí cuando dejé de concentrarme en las fluctuaciones, ahora me concentro en el Momentum(9).

___________________
(1): Ver Inversiones basadas en Valor del 14 de Junio, 2007.
(2): Ver Teoría de la Opinión Contraria del 25 de Abril, 2007.
(3): Ver el Principio Especulativo del 14 de Enero, 2007.
(4): Ver Caos ó Desorden del 21 de Mayo, 2007
(5): The Education of a Speculator, John Wiley & Sons, Professional, Reference and Trade Group. En el prefacio se lee: “I am a speculator, and my daily bread depends on reversing big moves. In economics terms, my function is to balance supply and demand.”
(6):
http://turtletrader.com/niederhoffer1.html
(7): Unpublished Work Ó 2005 Pedro Felipe La Corte Romero. Theory and Practice of Speculation. (El texto fue escrito originalmente en Inglés, luego no existe a la fecha una traducción al español.)
(8): En 1992, el millonario George Soros, a través de su hedge fund Quantum, atacó a la libra. Soros, especulador y filántropo, ordenó la venta de 10.000 millones de libras y la divisa se derrumbó.
(9): Momentum es la tendencia de un título a subir ó bajar consistentemente. Puede verse también como una medida de aceleración en el precio. La estrategia basada en momentum, no se recomienda a inexpertos. / Según Investopedia: The rate of acceleration of a security's price or volume. Once a momentum
trader sees an acceleration in a stock's price, earnings, or revenues, the trader will often take a long or short position in the stock with the hope that its momentum will continue in either an upwards or downwards direction. This strategy relies more on short-term movements in price rather then fundamental particulars of companies, and is not recommended for novices.

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